Uno de los acuerdos surgidos durante el desarrollo del Primer Seminario de Investigación y Enseñanza de la Lingüística celebrado en Santiago en agosto de 1970, fue crear una Comisión que se preocupara, entre otras tareas, de la continuidad de este tipo de actividades, y de dar forma a un organismo que aglutinara a personas dedicadas profesionalmente al estudio del lenguaje. Los miembros de la Comisión fueron Ambrosio Rabanales, Nelson Cartagena, Guillermo Araya, Adalberto Salas, Gastón Gaínza, Luis Gómez Macker y Alba Valencia.

Asistentes al Primer Seminario de Investigación y Enseñanza de la Lingüística
Dicha Comisión buscó un nombre para la futura institución, elaboró un anteproyecto de Estatutos y realizó todas las fases previas a la constitución de la Sociedad Chilena de Lingüística (SOCHIL), hecho que ocurrió en el marco del Segundo Seminario de Investigación y Enseñanza de la Lingüística, realizado en Santiago, en el mes de septiembre de 1971. La Asamblea Constituyente tuvo lugar el 9 de ese mes, y a ella concurrieron los siguientes profesores, cuyos nombres se ordenan alfabéticamente: Guillermo Araya, Máximo Bertens, Gastón Carrillo, Nelson Cartagena, Juan Castro, Lidia Contreras, Constantino Contreras, Gastón Gaínza, Andrés Gallardo, Luis Gómez Macker, Marina González, Eleazar Huerta, Alfredo Matus, Félix Morales, Marianne Peronard, Ambrosio Rabanales, Leopoldo Sáez, Adalberto Salas y Claudio Wagner, convirtiéndose en los socios fundadores de la nueva Institución.
Aquella sesión fundacional marcó un hito en la fecunda tradición de estudios lingüísticos en el país, porque permitió aunar esfuerzos entre pares, los que a corto plazo se materializaron en el avance sustantivo que la naciente Sociedad dio al estudio de la ciencia del lenguaje en las Universidades nacionales a través de la proposición de programas para los cursos de posgrado.
Se nombró un Comité Directivo, que estuvo compuesto por un Coordinador, un Secretario Ejecutivo, y tres Directores. Ellos comenzaron las tareas tendientes a lograr objetivos sociales tales como «favorecer la coordinación y la planificación nacionales de la investigación, la docencia y la extensión de las ciencias del lenguaje; proporcionar asistencia técnico-científica a personas o instituciones; ayudar al perfeccionamiento científico de sus socios; informar acerca de las actividades y proyectos de la institución y del estado de los estudios lingüísticos en el país; realizar actividades de divulgación científica, seminarios y congresos de lingüística». (cf. Cartagena, Nelson. 1972. «Constitución de la Sociedad Chilena de Lingüística» en Actas del II Seminario de investigación y enseñanza de la lingüística, Valdivia, p. 138).
Ya en la primera Asamblea, en 1971, se acordó sesionar una vez al año, en el marco de lo que se llamó Seminario de investigación y enseñanza de la lingüística, actividad que se desarrollaría durante cinco días. Entre otras cosas, se acordó, también, editar un Boletín Informativo, y se creó la Comisión de Planes y Programas, cuya proposición de programas para los cursos de posgrado, publicada en 1972, fue el punto de partida del grado de Magister en Lingüística en el país. Posteriormente, se crearon otras Comisiones de Trabajo, con resultados muy halagadores, aunque algunas han tenido una existencia efímera.
La Comisión de Lengua Materna, agrupó a un gran número de socios y, desde su creación en 1987 hasta su receso, en 1994, celebró cuatro encuentros. Producto de uno de ellos fue la seria y documentada respuesta a la proposición de objetivos fundamentales y contenidos mínimos de la Enseñanza Básica y la Enseñanza Media del Ministerio de Educación. La Comisión de Lenguas Indígenas, creada en 1980, estuvo activa hasta 1993 y, durante ese tiempo realizó numerosas reuniones y publicaciones. La Comisión de Lenguas Extranjeras, se constituyó en 1992 y su labor se concretó con la realización del Congreso de Plurilingüismo. Cayó en receso en 1996.
En un intento de revitalizar este tipo de actividad que, en el pasado, se reveló como muy productiva, se han formado nuevos núcleos de trabajo a cargo de los socios que se mencionan en Organización.
Pero sin duda, la actividad que ha caracterizado nuestro quehacer como Sociedad han sido los Seminarios. En un comienzo, tuvieron claramente una intención formativa: se escuchaban conferencias de maestros, se discutía, se dialogaba. Paulatinamente –y por diversas razones– se han ido transformando, reduciendo las clases magistrales a solo tres, en favor de la presentación de ponencias de los socios. Se ofrecen, también, cursillos de perfeccionamiento, generalmente, a cargo de especialistas extranjeros invitados. La Asamblea de Socios de 1995, decidió cambiar el nombre de esta actividad por el de Congreso de la SOCHIL. Hasta este momento, se han celebrado XV Congresos y ya ha sido convocado el número XVI para noviembre de 2005. En su mayoría, los Congresos se han realizados en las aulas de las distintas Universidades del país, generoso gesto que la SOCHIL ha recibido con agradecimiento.
Tradicionalmente, se han publicado las Actas de estos encuentros científicos. Algunas han sido ediciones independientes, pero cuando las arcas comenzaron a dar señales de poca solvencia, la Sociedad recibió el apoyo de las prestigiosas revistas especializadas Estudios Filológicos, de la Universidad Austral de Chile, y RLA, Revista de Lingüística Teórica y Aplicada, de la Universidad de Concepción y de ese modo, las actas de los Seminarios pasaron a llenar las páginas de los volúmenes anuales de esas publicaciones. Cabe señalar que generosamente, los Comités directivos de dichas revistas hacen llegar gratuitamente sus ejemplares a los miembros activos de nuestra institución.
Aparte de los congresos bienales, se han convocado otras reuniones, como las siguientes:
La SOCHIL recibió, en las décadas del 70 y 80, la visita especial de destacados lingüistas que dictaron cursos y conferencias. Ellos fueron el Profesor Dr. André Martinet, de la Universidad de París, Francia; el Profesor Dr. Bernard Pottier, también de la Universidad de París; el Profesor Dr. Eugenio Coseriu, de la Universidad de Tübingen, Alemania; y el Profesor Dr. Paul Garvin, de la Universidad de Nueva York, Estados Unidos de Norteamérica.
En octubre de 1994, se celebró el Congreso Pluralismo lingüístico, educación y desarrollo nacional, debate con el que la Sociedad reaccionó ante la política reductora del Ministerio de Educación con respecto a la enseñanza de una segunda lengua en los establecimientos educacionales, mostrando la situación nacional en ese aspecto, destacando la importancia del multilingüismo y proponiendo estrategias educacionales. A este acto asistieron expertos en lenguaje, profesores de idiomas, asesores del Ministerio de Educación, representantes de CONADI, diplomáticos, empresarios y estudiantes universitarios.
En septiembre de 1996, la Sociedad conmemoró sus 25 años de existencia con un Acto Académico.

Conjunto de Madrigalistas de la Universidad de Playa Ancha
En esa ocasión, se rindió homenaje a los socios fundadores y a los que se habían desempeñado como presidentes y secretarios de la institución. Aparte de los conferencistas nacionales, fueron invitados, especialmente, el Profesor Dr. Ignacio Bosque, de la Universidad Complutense de Madrid y Miembro de Número de la Real Academia Española de la Lengua; y la Profesora Sylvia Costa, de la Universidad de la República, Montevideo, Uruguay. Se contó también con el marco musical del Conjunto de Madrigalistas de la Universidad de Playa Ancha. La publicación Un Aniversario Especial contiene el desarrollo de este acto académico.
Otro hecho memorable para la Sociedad ha sido la obtención de la Personalidad Jurídica, que consta en el Decreto Supremo Nº 478, de fecha 28 de mayo de 2001.

Diario Oficial de la República de Chile
Jueves 12 de Julio de 2001, p 9
Es importante destacar que, para todas las gestiones en pro de la personalidad jurídica –una antigua aspiración de la Sociedad–, se contó con la generosa y eficiente asesoría y colaboración del abogado Sr. Hernán Tubino Onell, quien no dudó en constituirse en el aval legal de la Institución.
Para la realización de los trámites de rigor, como consta en los documentos respectivos, hubo que «constituir una corporación de derecho privado denominada Sociedad Chilena de Lingüística«, lo que ocurrió «el 21 de diciembre de 1998, en la Universidad de Santiago de Chile. Presidió la reunión Alba Valencia y actuó como secretaria, Gilda Tassara». Los otros miembros de ese directorio eran Leopoldo Sáez, Cristián Noemi y Gladys Cepeda.
Firmaron el Acta de Constitución, en calidad de socios fundadores: Leopoldo Wigdorsky Vogelsang, Adalberto Salas Santana, Guillermo Soto Vergara, Alba Valencia Espinoza, Bélgica Watts Rivera, María Horsella Vidal, Marianne Peronard Thierry, Juana Marinkovich Ravena, Gilda Tassara Chávez, Herminia Moreno Burgos, Leopoldo Sáez Godoy, Miriam Uribe Cid, Alfredo Matus Olivier, María Oyanedel Fernández, José Luis Samaniego Aldazábal, Marina Guzmán Sanhueza, Carlos Zenteno Bustamante, Humberto Valdivieso Arias, María Angélica Monardes Skiner, Gloria Muñoz Rigollet, Ambrosio Rabanales Ortiz, Víctor Vergara Verdugo, Héctor Ortiz Lira, Cristián Noemi Padilla, Mauricio Pilleux Dresdner, Gladys Cepeda Rodríguez, María Teresa Poblete Benett, Mario Bernales Lillo, Julia Hermosilla Sánchez y Constantino Contreras Oyarzún.
A lo largo de estos años, las sucesivas Directivas de la Sociedad se han preocupado de establecer o mantener contacto con las autoridades del Ministerio de Educación: Ministros, Directores de Educación Superior y de Educación Media, personeros encargados de tomar decisiones que inciden directamente en el ejercicio profesional de los socios. En las entrevistas sostenidas se les ha dado a conocer la Institución, su quehacer, sus publicaciones, y se ha puesto a disposición de ellos el potencial profesional con que cuenta la Sociedad.
Por último, en esta breve reseña, cabe señalar que un importante testimonio de las actividades e intereses de la Sociedad se encuentran en las Actas de los Seminarios y Congresos, como se ha indicado, pero también en ediciones independientes como Planes y Programas para Magistratura en Lingüística (1972); Alfabeto mapuche unificado (1988); Uso del alfabeto mapuche unificado (1989); Educación bilingüe bicultural (1992), folleto informativo para la comunidad indígena sobre la fundamentación e implicancias de este programa; La enseñanza de lenguas extranjeras en Chile (1995); Actas del Congreso Pluralismo Lingüístico, Educación y Desarrollo Nacional (1996); Un aniversario especial (2001); Desde el Cono Sur. Homenaje a Juan M. Lope Blanch (2003). Se han publicado, con el patrocinio de la SOCHIL, Cómo hablamos en Chile. Ocho aproximaciones, de Leopoldo Sáez (2000), y La fonética en Chile. Bibliografía Analítica (1829-2000), de Héctor Ortiz y Eugenia Saavedra (2003). También la publicación de un Boletín Informativo que, gracias a la tecnología, ha sido reemplazado por www.sochil.cl